martes, 7 de diciembre de 2010

"El Agujero"

Llevo varios días que no salgo de casa. No me apetece, es más, oooooooodio salir. ¿acaso me estoy haciendo mayor? Antes me encantaba salir y tomarme unas cervezas con mi pareja y mis colegas... pero ahora... uffff, es que me cuesta levantarme del sofá.

De hecho el sofá, la parte derecha que está pegada justo a la mesa camilla... esa es mi parte favorita, y le he puesto nombre y todo (el agujero). Engancha... coger el portátil y sentarte ahí, con el calorcillo que sube desde el radiador, facebookando y viendo la tele... con la mesa puesta de la noche anterior... aysss... qué gustirrinin. Como ayer recogí la casa un poquito hoy no tengo cargo de conciencia por ver la ropa para doblar, quizá mañana consiga tener ganas. 

En "el agujero" todo es más cómodo y más relajado... me enfado menos con los niños... paso de los putos controladores... las chorradas de Rajoy... y repito, esto engancha. A mi marido, que nunca ha tenido la costumbre de estar tapado hasta las orejas, le encanta también, así que quien primero se levante tiene la inmensa suerte de quedarse con él. 

Llueve, llueve y llueve. Sigo sin tener ganas de salir, pero hago un gran esfuerzo para poder dar una vuelta. Me ducho, me arreglo (cabreada porque he engordado y tengo poca ropa) y salimos. Son las 1'30 de la mañana y salimos por la puerta. Hemos cogido el coche y pa lante. Como no tenemos un puto duro nos dedicamos a pasear por Granada. El aparcamiento a estas horas es fácil. En plaza Nueva no hay tanta humedad ni hace frío así que es bonito pasear. Hemos llegado al paseo de Los Tristes hablando del pasado (un arma de doble filo) y mirado la Alhambra. Estaba a oscuras y daba miedo... El paseo estaba lleno de hojas gigantescas. Dando media vuelta me he fijado en los balcones... y echando de menos mi móvil para hacer fotos, hemos seguido hasta el coche. El paseo se había terminado y hemos vuelto a casa.... al agujero... Esta vez lo hemos compartido... tumbados juntos...